El embalse de Villar del Rey y la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) 'Santa Engracia' de Badajoz han acogido un proyecto pionero a nivel nacional de monitorización del control del agua subvencionado por el Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) con el apoyo del Ministerio de Economía y Competitividad y del Ejecutivo regional y la ayuda del programa Feder-Innterconecta para Extremadura.
El proyecto 'Sistema de Monitorización del Agua en Tiempo Real con Tecnología Inteligente' (Smartic) ha sido elegido entre más de cien propuestas empresariales por el CDTI y tiene como objetivo principal desarrollar indicadores avanzados que permitan una evaluación en continuo de la calidad de las aguas, desde la captación hasta la salida de los tratamientos y desde el punto de vista de su idoneidad para el consumo.
La ETAP 'Santa Engracia' de la capital pacense ha albergado este miércoles la clausura de este proyecto desarrollado en Extremadura en las citadas localizaciones de la provincia pacense del 1 de junio de 2013 al 31 de enero de 2015 con un presupuesto total de 1.065.361 euros y en el que participan las organizaciones FCC Aqualia, líder del mismo y que aporta 306.539 euros, junto con Adasa Sistemas, Coveless Ingeniería, Homeria Open Solutions, Enmusa y Gestiona Global.
También ha contado con la colaboración de la Universidad de Extremadura y del Centro Tecnológico Industrial de Extremadura (Cetiex) y ha sido subvencionado por el CDTI con cargo al fondo tecnológico- fondos FEDER.
El alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, ha acudido a este acto de clausura oficial que también ha contado con la presencia del delegado de Aqualia en Extremadura, Francisco Blanco, el investigador principal del proyecto, Ángel Encinas, y representantes de la corporación municipal.
DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO SMARTIC
Durante la clausura, Ángel Encinas ha sido el encargado de explicar los detalles de este proyecto cuyo objetivo se completa con diferentes aportaciones de cara a la optimización y automatización de los procesos de potabilización actuales, mediante sistemas portátiles de control avanzado que permitan optimizar el punto de captación en un embalse, así como las dosificaciones de reactivos principales en un proceso convencional, lo que supone una mayor seguridad de los suministros de agua de consumo.
Así, el sistema Smartic se completa integrando estos equipos, junto con la sonda multiparamétrica de la captación y determinadas sondas online instaladas a lo largo del proceso de potabilización, en un sistema central que recibe todas las señales de forma inalámbrica y que está controlado mediante un software diseñado para poder controlar el proceso de forma remota y en tiempo real y apoyar al operador en la toma de decisiones.
Al respecto, Encinas ha puntualizado que el proyecto consiste en monitorizar mediante diferentes sensores ubicados en ambas localizaciones, en el embalse y en la entrada, durante el proceso de potabilización y a la salida de la planta, para poder tener continuos datos de los parámetros de la calidad del agua.
Ha indicado que ello supone "un mayor control" porque se tienen datos "instantáneamente en una pantalla" e información de la calidad del agua en el embalse y en la planta permitiendo "actuar más rápidamente", "crear alarmas" y "con ello cumplir la ley como se está cumpliendo hasta ahora, pero con un mayor control", al tiempo que ha apuntado que la calidad del agua de Badajoz cumple la marcada por la legislación vigente.
PROYECTO PENSADO PARA SER REPLICADO
Por su parte, Francisco Javier Fragoso se ha mostrado "orgulloso" de que un servicio del ayuntamiento sea "modelo a la hora de parametrizarlo y a la hora de investigar para después poder ser implantado" en la ciudad de Badajoz y que sea "replicado en muchas otras plantas", en relación a lo cual ha señalado que uno de los fines de Smartic es que cada empresa participante desarrolle "su parte del proyecto" para "después poder ser lanzado al mercado".
A este respecto ha garantizado que la calidad del agua en Badajoz "es la misma antes que después del proyecto" que "aporta muchas cosas" aunque "no" desde el punto de vista de mejora de la calidad, a la vez que ha agregado que en la capital pacense hay "un agua de primera", "buena para los niños y mucho mejor que el agua embotellada".
También ha hecho hincapié en que este proyecto permite "saber cómo está saliendo el agua del pantano" y ello, a su vez, "ser mucho más eficiente en la gestión de los recursos públicos a la hora de potabilizar el agua" mediante diferentes reactivos, así como "la posibilidad de no depender en todas las horas de tener que hacer análisis de laboratorio" al contar con "parámetros automáticos".
TOMA FLOTANTE
Ante ello, el alcalde ha adelantado que el consistorio se está planteando "una futura inversión" y ver la posibilidad de captar ayudas en el nuevo marco de fondos europeos para disponer de una toma flotante que pudiera variar la altura del pantano a la que se coge el agua en función de los parámetros de calidad del agua que marca la sonda y de cara a un consumo menor de reactivos como el cloro.
"Cuanto mejor calidad de agua se coja en origen menos necesidad de productos para tratarla necesitaremos en la planta", ha defendido Fragoso, que ha matizado que "no va a variar en la calidad del agua que le sale a los ciudadanos, que sigue siendo la misma, pero sí en la cantidad de reactivos y en la eficacia con la cual vamos a potabilizar el agua, lo cual es tremendamente importante a la hora de gestionar y de ahorrar recursos".
Por último ha cifrado en unos 200.000 euros aproximadamente la cuantía de este proyecto que se pretende plantear a la Unión Europea para poderlo cofinanciar.
