El hospital de fauna salvaje AMUS, en el marco del programa 'Viajeras', pondrá en libertad a rapaces transaharianas este jueves, a las 19,30 horas en la presa de Alange, con vista "a ese largo viaje de retorno que en estos días emprenderán hacia África".
El proyecto 'Viajeras' persigue validar y protocolizar algunas técnicas biomédicas en la recuperación de rapaces transaharianas y demostrar la "idoneidad de los protocolos desarrollados" en el hospital
con estos ejemplares de "gran valor biológico y cultural", según ha informado AMUS en nota de prensa.
En este sentido, este centro vuelve a aparecer como "una oportunidad" para los ejemplares de especies muy dispares, algunas de ellas en peligro de extinción, que han ingresado o ingresarán a lo largo de 2014 procedentes de la provincia de Badajoz, y que algunas son conocidas en diversos foros por la "particularidad de sus casos clínicos".
Este hospital de fauna salvaje ha explicado que en su trayectoria ha sabido evolucionar y conformar un "equipo muy polivalente de profesionales" en campos biomédicos que dan respuesta a los centenares de ejemplares que ingresan heridos o enfermos.
El trabajo en red con instituciones, universidades, gobiernos y otras entidades especializadas ha permitido a esta institución "asumir una función en extremo compleja y con repercusiones globales", ya que muchas de las especies con las que se trabajan en él viajan por varios continentes.
Así, AMUS ha resaltado que la internacionalidad de unas acciones, concebidas a priori como locales, como puede ser operar a un águila, dejan de serlo cuando este ave en tres meses deberá estar en Mali o Senegal.
EFECTOS GLOBALES
Esta idea de efectos globales "ha bañado el hacer" de un hospital de fauna salvaje, el de AMUS, cuyas técnicas y "constante innovación" lo han convertido" en un centro "de recuperación referente" en España.
AMUS ha explicado que las estadísticas, durante 2014, parecen querer marcar retos históricos de admisiones e hitos en el "modo" y en el "hacer" de recuperar casos clínicos "de gran dificultad".
Casos como el de un águila real que lleva más de un año y medio en el hospital, que ingresó con una fractura en un ala y que la han tratado con implantes óseos y aplicación de ultrasonidos.
También casos de varias águilas calzadas intervenidas en maniobras quirúrgicas "muy avanzadas", demandantes "de alta experiencia y conocimientos postquirúrgicos y de rehabilitación".
Así como milanos negros igualmente asistidos de laceraciones y perforaciones por enganches, o búhos reales operados con una técnica "muy novedosa dirigida por AMUS" para las membranas patagiales en aves atrapadas en alambradas de espinos.
Sin embargo, "el gran salto" de AMUS ha sido pasar de operarlas a tener que convertirse igualmente en una "segunda oportunidad" para aves pequeñas, "de apenas 80 gramos" de peso (e incluso menos, como es el caso de vencejos).