El pacense Miguel Espinosa se ha proclamado campeón absoluto y campeón regional del I Campeonato de Extremadura de Altanería, que se ha celebrado este pasado fin de semana en Llerena (Badajoz), con un "rotundo éxito" de participación y de público.
El campeonato de esta "espectacular modalidad cetrera" combinó tanto la competición de altanería, como las jornadas divulgativas, por lo que además de las fases de clasificación y la final, tuvieron lugar las ponencias del doctor en Geografía y cetrero Rafael Hernández Mancha, quien habló de 'Geografía de la cetrería', y del catedrático de la Universidad de Valladolid y director del Archivo Iberoamericano de Cetrería, José Manuel Fradejas Rueda, quien se refirió a 'Una historia de la cetrería'.
Esta primera edición del campeonato regional atrajo a numerosos curiosos, aficionados a la altanería y autoridades como el consejero de Agricultura, Antonio Echávarri; el presidente de la Diputación de Badajoz y alcalde de Llerena, Valentín Cortes, entre otros.
El lema de la cita fue 'Cetrería en estado puro', y la competición se desarrolló bajo las normas de Sky Trial, una "modalidad de vuelos de altanería a paloma mensajera, en la que cuando el halcón alcanza su máxima altura se produce la suelta de la paloma mensajera".
En este caso, el jurado realiza una valoración tanto de la altura alcanzada por el halcón, como de la compenetración con el halconero, la intensidad del picado y la captura, en caso de que se produzca.
Durante el campeonato, Miguel Espinosa demostró la "mayor destreza" durante las dos jornadas en las que se desarrolló la prueba, según el jurado, "convirtiéndose en campeón absoluto y campeón autonómico, por lo que representará a Extremadura en el próximo Campeonato de España".
Por su parte, el podio lo completaron el madrileño Felipe Alves, segundo, y el coriano Rafael Fernández, tercero. Asimismo, rozó el cajón José Ignacio Tejeda, de La Albuera.
El ganador recibió un emisor de telemetría para cetrería Ayama, modelo Vesta, 600 euros y una caperuza; mientras que Alves consiguió 400 euros y una caperuza, al tiempo que Fernández se hizo con un equipo de cetrería compuesto por chaleco, guante, tornillo, lonja, caperuza, señuelo, pihuelas y cascabeles. Por último, Tejeda recibió una paleta ibérica y una caperuza.
