Unas 500 personas, según la organización, entre vecinos de Navalvillar de Pela y de La Nava de Santiago, agricultores o representantes de organizaciones agrarias se han concentrado este viernes frente a la Delegación del Gobierno en Badajoz para que se refuerce la seguridad ante los robos en el campo.
Convocada por el Ayuntamiento de Navalvillar de Pela, la plataforma ciudadana contra robos e injusticias y cooperativas de la localidad con el apoyo de COAG y UPA-UCE y de vecinos y agricultores de La Nava de Santiago, en la concentración se ha leído un manifiesto que defiende que los robos en el campo "se han convertido en uno de los principales problemas para los habitantes del medio rural", que ven día a día "cómo crece la inseguridad" en sus pueblos.
"En la campaña de aceituna 2015-2016 hemos sido víctimas de los ladrones, mafias organizadas que destruyen el trabajo de todo un año en una sola noche. Los agricultores y ganaderos extremeños nos sentimos desprotegidos e indefensos ante los robos en nuestras explotaciones", ha agregado el comunicado, que también indica que el colectivo de afectados están "cansados de tener que hacer frente a un problema del que se tienen que ocupar las administraciones".
En este sentido, han reivindicado que "urge" tomar medidas para reforzar la seguridad en los pueblos y explotaciones y que las soluciones comienzan por destinar más efectivos para el medio rural, especialmente en las zonas en las que aún continúe la campaña de aceituna, y han tachado de "necesario" controlar los caminos y el transporte de la aceituna, así como los puestos de recepción en la región para que este producto no tenga salida al mercado.
También han abogado por el establecimiento de un marco regulatorio para determinar la trazabilidad de la aceituna y por que se legisle la práctica del rebusco "para que no se utilice como excusa para el robo".
"Exigimos a la Delegación del Gobierno que garantice la seguridad de los habitantes del medio rural, especialmente los agricultores y ganaderos que viven y trabajan cada día con la amenaza de los robos", ha subrayado el comunicado.
"TINTES DRAMÁTICOS"
Sobre este tema, el alcalde de Navalvillar de Pela, Francisco Javier Fernández Cano, ha sostenido que el alcance de los robos en esta localidad "ha tomado tintes dramáticos durante este año" dado que, aunque con "cierta normalidad", los agricultores han sufrido robos en años anteriores.
"Lo que empezó con una serie de robos masivos en el mes de noviembre en tres o cuatro explotaciones del municipio se ha convertido realmente en una avalancha durante el resto de días durante la campaña", ha indicado.
En su opinión, el hecho de que durante esta campaña de aceitunas el precio "haya sido mucho más alto" y la terminación de la campaña en otras zonas de la provincia como Almendralejo antes de la comarca de La Siberia "ha hecho que mucha gente de etnia rumana, en este caso la mayoría, esté allí día tras día hurtando y cogiendo aceitunas con la excusa del rebusco".
Al respecto, no ha podido aportar una cifra concreta de agricultores afectados, pero sí ha lamentado que desde hace tres o cuatro semanas se están registrando de uno a dos o tres robos diarios.
"Hay una patrulla de guardería privada que se paga entre las cooperativas y el ayuntamiento y gracias a ellos se está haciendo que, por lo menos, los robos se paren y cada vez que se coge a los ladrones están devolviendo las aceitunas a las almazaras para que por lo menos el producto se quede allí", ha agregado Fernández Cano, que ha añadido que "se le incautan los rodillos, que son los elementos del delito, y se les deja marchar tomándoles los datos la Guardia Civil para citarles posteriormente a una vista judicial".
PRINCIPAL PROBLEMA DEL CAMPO Y DEL SECTOR
Por su parte, el secretario general de UPA-UCE en Extremadura, Ignacio Huertas, ha indicado en declaraciones a los medios que este viernes agricultores y vecinos de Navalvillar de Pela y de La Nava de Santiago que "se están viendo acosados" están ante la Delegación del Gobierno para poner de manifiesto el problema que tienen.
Así, Huertas ha indicado que en esta campaña de la aceituna "ha surgido una problemática que se ha convertido en el principal problema del campo con carácter general" y "el primer problema que hay en el sector".
De esta forma, ha lamentado que no solamente están sufriendo robos "constantemente" y "no son capaces de parar las oleadas de robo que está habiendo", sino que, además, "cuando se coge a los que roban prácticamente no ocurre absolutamente nada, con lo cual al día siguiente el problema se repite".
Ante ello, ha trasladado a la Delegación del Gobierno en nombre de UPA-UCE que "no solamente" hay que mantener la seguridad y "presionar en las zonas en las que todavía queda cosecha" para que se pueda terminar la misma "sin que se produzcan más altercados de los que ya se han producido", sino que "tiene que haber solución a medio y largo plazo para esta situación".
Dicha solución, a su juicio, pasa por el hecho de que la seguridad sea un tema público y "poniendo más efectivos en el mundo rural en general, en el campo, de la Guardia Civil" y por el desarrollo de una reglamentación que regule los puestos o la trazabilidad para que "se asegure que efectivamente no se producen los problemas de blanqueo de aceitunas que se está produciendo en este momento".
Finalmente, Huertas ha calificado la situación que viven las dos citadas localidades de "amenaza constante" y ha lamentado que, durante esta campaña de aceituna en Extremadura se puede hablar de un millón de euros "en pérdidas directas" de los agricultores y ganaderos, además de los destrozos que se producen cada vez que se registra un robo de este tipo.
