Llega el verano y las vacaciones. Llega el momento de elegir playa o montaña. Y, para los días de ocio en el exterior, una de las elecciones más importantes, ¿qué preparar: barbacoa de pescado o carne?
Para resolver esta duda o dilema vamos a hablar de los dos tipos de barbacoa, ver los ingredientes de cada una de ellas, por qué elegir una y otra y sus beneficios para la salud. Aunque lo más importante, por encima de todo, es la seguridad,
para lo que la OCU nos ofrece una serie de recomendaciones.
De qué se compone una barbacoa de carne
Excepto algunos embutidos como el jamón, la mayoría de las carnes se pueden preparar a la barbacoa.
Los productos del cerdo son los más comunes en las barbacoas españolas. Esto es: chorizo, morcilla, panceta, chuletas o bacon. Todos ellos son productos con un alto valor proteínico y de grasas y tienen la ventaja de que se preparan rápido y tienen mucho sabor.
Junto al cerdo, el cordero es otro de los animales más consumidos, y sus chuletillas de lechal las protagonistas de cualquier barbacoa. Su sabor dulce mezclado con el de la sal gorda, y el hecho de que se preparan en un santiamén, las convierte en un delicatessen en cualquier parrilla o plancha.
Pasemos a animales más grandes como los vacunos. Con esta carne podemos preparar magníficos entrecot, chuletones, solomillos o gigantescas costillas. Carnes de gran calidad, jugosas y que combinan bien con otros animales.
Además de los productos citados anteriormente, también es común ver en las barbacoas carne de aves: alitas, muslos o filetes de pollo o pavo, e incluso carnes de aves de caza como la perdiz o codorniz. Y por supuesto, nunca faltan en una barbacoa los pinchos morunos, que pueden ser tanto de cerdo como de pollo o vacuno.
En cuando a los acompañantes para las barbacoas de carne, los pimientos (rojos y verdes) son muy comunes además de verduras como el calabacín o las clásicas patadas asadas o la cebolla.
Barbacoas de pescado, marisco y otros productos del mar
Entre los pescados, las sardinas son históricamente los ingredientes más utilizados, especialmente en fiestas populares. Además de las sardinas, el resto de pescados azul y blanco como el rodaballo, los boquerones y el rape tienen hueco en la parrilla.
Ya en el terreno de los mariscos, las gambas, los langostinos y las cigalas son los productos más utilizados, aunque no hay que olvidarnos de las almejas, chirlas o mejillones que, aunque se suelen preparar en cuencos con aliño de limón o aceite de oliva, también están presentes.
Cuándo se elige una barbacoa de pescado y cuándo una de carne
El primer criterio de elección tiene que ver con los gustos de los comensales: si la gente es de comer carne, la barbacoa será de carne. A partir de aquí, elegir uno u otro tipo puede deberse a dos razones principales.
- Aprovechar los productos frescos de la zona. Si estamos en el interior, las barbacoas de carne suelen ser muy comunes. Por ejemplo en la zona de Castilla León, el cerdo y el vacuno copan las barbacoas en pueblos y ciudades. Por otro lado, si se vive en la costa, por ejemplo en Cádiz, el chipirón, los boquerones y otros pescados de la zona son los más utilizados porque, prácticamente, salen del mar para ponerse sobre la parrilla.
- Otra razón para elegir un tipo de barbacoa u otra tiene que ver con motivos de salud. Las personas que padecen de colesterol, van a preferir barbacoas de pescados azules que contienen Omega 3 y así, al menos, no aumentar los niveles de grasas en las sangre. Mientras que personas que padezcan de gota, pueden preferir carnes de ave y cordero antes que mariscos.
Beneficios en los dos tipos de barbacoa
Ya hemos dicho que en el caso de los pescados azules como el salmón, la sardina o, incluso variedades de sushi, el Omega 3 cumple un papel muy importante para la salud. En el caso de las carnes, también tenemos que tener en cuenta que cualquiera de ellas que se cocine en plancha va a generar mucha menos grasa que si se fríe, ya que se asa con los propios líquidos de la carne y produce menos toxinas.
No obstante, los beneficios de las barbacoas, en los dos tipos, también vienen derivados del uso de productos de aliño como el limón, el aceite de oliva, la soja y otros productos saludables que ayudan a degustar una barbacoa, convertirla en un plato sabroso y, sobre todo, saludable.
